Este viernes volverán a movilizarse familiares, gremios, y diversas organizaciones para reclamar el desprocesamiento y cierre de la causa que pretende enjuiciar a ex colectiveros de la línea Este por haber defendido sus derechos laborales. Denunciaron “graves violaciones a los derechos humanos”
Este lunes se cumplieron dos meses desde que la Justicia privó de su libertad a cuatro ex choferes de la Linea Este acusándolos de “coacción agravada en concurso real por daños” por haber participado de una movilización hace dos años en el marco de un conflicto laboral con la empresa a raíz de un reclamo por la mejora en las condiciones laborales.
Pasaron 26 días en prisión en cárceles comunes con enormes restricciones para recibir visitas como si fueran peligrosos delincuentes hasta que el pasado 29 de abril se logró –tras varias movilizaciones y reclamos– que el Juez de Garantías Nº2 Jorge Moya Panisello les otorgara la prisión domiciliaria. Es decir, los ex colectiveros Sebastián Mac Dougall, Emanuel Lazzaro, Pablo Varriano y Luciano Fiocchi, están ahora en sus casas, pero sin embargo siguen presos.
Hasta el momento, el magistrado sólo los autorizó para salir de sus domicilios para ir a trabajar, y para nada más. “Se dan situaciones de violación a los derechos humanos como el caso de Emanuel (Lázzaro) que su hija se enfermó y no podía ir a llevarla a ser atendida porque no tiene ese permiso. No puede ejercer un derecho fundamental como poder llevar a una hija que está volando de fiebre a hacerse atender al médico”, se indignó Carlos Zaidman, integrante de la Asociación Ex Detenidos Desaparecidos (AEED) en la conferencia de prensa que familiares realizaron hoy junto a representantes gremiales, organismos de derechos humanos y organizaciones políticas y sociales.
En este contexto, anunciaron una marcha de antorchas para este viernes a las 18 desde Plaza Moreno hacia la Gobernación provincial, a quien también hacen responsable de esta situación. “Exigimos que se caiga la causa, que se archive todo. Denunciamos a la fiscal Virginia Bravo, a la gobernadora María Eugenia Vidal, que atacan a los trabajadores que nos organizamos para luchar por nuestros derechos. Pedimos a los ciudadanos que nos acompañen, para seguir mostrando la disconformidad por cómo está actuando el gobierno”, remarcó Gabriel Chiaffitelli, otro de los ex choferes que participó de aquel conflicto en 2017 y también resultó despedido.
“Exigimos el desprocesamiento y el archivo de la causa iniciada hacia los choferes de la Línea Este que fueron procesados por el sólo hecho de luchar por trabajo digno. No sólo fueron despedidos si no que además fueron procesados”, señaló el secretario general de ATE Provincia y de la CTA Autónoma bonaerense Oscar De Isasi, quien además calificó a la causa como “una maniobra siniestra del poder político, de los empresarios y de un sector de Poder Judicial que quiere aleccionar a los trabajadores y las trabajadoras que luchan en el ejemplo de estos compañeros de la línea Este”.
En esa línea, Zaidman agregó: “Hay un cúmulo de violaciones de derechos, con el fin de aleccionar, amedrentar y tener en caja al conjunto de los que salimos a luchar contra estos planes hambre, miseria y desocupación. Nosotros creemos que hay que dar la lucha por la libertad de los compañeros, y ahora estamos en un momento crucial porque la causa -después de haber pasado por la Cámara- ahora volvió a bajar al Tribunal de Instrucción. Este es el momento en que la fiscal y el Juez tendrían que archivar la causa y darle la libertad definitiva”.
Por su parte, Gabriel Lázzaro, papá de Emanuel, recordó que “lo que pidieron (en 2017, durante el reclamo gremial) fue un baño y no trabajar 16 horas corridas, porque cuidaban a la gente. Pero los detuvieron como si fuesen delincuentes. Los chicos tienen familia, estamos viviendo una pesadilla. Alguien tiene que ver esta causa y decir que es injusto, no puede seguir avanzando, se tiene que terminar”.
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