Este martes inicia el juicio contra el médico policial, José Daraio que encubrió y manipuló las pruebas del cuerpo de Sebastián. El perito forense está imputado por falso testimonio, a pesar de que la familia del joven lo denunció por encubrimiento. Todavía no hay ningún condenado por el asesinato
Por Estefanía Velo
José Daraio era el médico policial de Punta Indio cuando Sebastián Nicora, de 16 años, fue hallado muerto en el balneario El Pericón en febrero de 2013. Pero “Sebas”, como le decían sus amigos y familiares, no murió sólo: a Sebastián lo mató la policía Bonaerense.
El primer informe de la autopsia, realizado por Daraio, señaló como causal una herida producida por elemento punzante apuntando como principal culpable a un amigo del joven. Sin embargo, en octubre de 2014 gracias a la gran lucha que llevó adelante su mamá, Fernanda Nicora -quien hoy ya no está presente ya que falleció en febrero de 2017- lograron una segunda autopsia.
En ese caso, estuvo a cargo la Asesoría Pericial de La Plata la cual determinó que Sebastián tenía restos de pólvora y un orificio de entrada de bala en su cráneo. Desde ese momento, la causa que pretendió cerrarse de manera exprés dio un giro importante dejando expuesta la maquinaria de encubrimiento cuando se habla de un caso de gatillo fácil.
Según informó la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), fueron los peritos de Gendarmería quienes aseguraron comparando ambas autopsias que el médico Daraio no podía haber eludido esa prueba.
La fiscal de instrucción de la UFI 1, Ana Medina, estuvo a punto de archivar la causa siguiendo la primera hipótesis. Para ella, Sebas se había peleado con su amigo y éste lo mató.
Tras los resultados de la segunda autopsia, la Comisión Provincial por la Memoria inició una nueva denuncia contra el médico Daraio y los ocho policías que se encontraban en esa madrugada del 14 de febrero de 2013 por encubrimiento.
En cambio, la fiscal Medina imputó sólo al médico forense y elevó a juicio la causa por “falso testimonio”, un delito excarcelable. El debate judicial será este martes 9 y miércoles 10, ante el Juzgado Correccional N° 2 presidido por el juez Eduardo Ezkenazi. Allí declararán los policías que intervinieron en esa madrugada. Muchos de ellos, ascendidos en su escalafón policial siguen ejerciendo funciones en la localidad de Punta Indio a pesar de estar señalados como responsables de la muerte de Sebastián.
Impunidad y encubrimiento policial: el caso de Sebastián Nicora
Verdad y Justicia
“Esta es la única opción que tenemos para saber algo, alguna pista para saber qué pasó con Sebastián”, expresó Vanesa, integrante de vecinxs autoconvocadxs de Punta Indio y Verónica a Pulso Noticias. Las y los vecinos de esa localidad ribereña han organizado diversas actividades exigiendo justicia por Sebas.
Cabe mencionar que en paralelo continúa abierta la causa por homicidio, y también la de encubrimiento contra los policías. Según denunció el abogado de la CPM a Pulso Noticias, “esas causas se encuentran paradas”.
Asimismo, Vanesa se refirió a que el médico Daraio es un especialista en autopsia sin embargo no le realizó ninguna placa a Sebastían y firmó el acta de muerte provocada por un golpe. “Tenía todas las posibilidades de hacerle los estudios a Sebastián y no lo hizo. Y si después de 20 meses había pólvora y entrada de orificio, realmente no lo quisiste ver”, afirmó.
Más conocida como “Tefa”, nació en Mar del Plata en 1989. Trabajadora de prensa, periodista y Licenciada en Comunicación Social (egresada de la UNLP). Buscadora de la aguja en el pajar: le apasiona el periodismo de investigación. Trabajó en prensa institucional, en diversos medios privados de La Plata, y colaboró en medios alternativos como ANRed. Actualmente escribe notas vinculadas a los derechos humanos, política y cada tanto entrevista a personajes de diversos territorios. También integra el área audiovisual, En Foco, como productora periodística. Siempre redactando con las gafas violetas puestas. Desde 2018 forma parte de la cooperativa Pulso Noticias, donde aprendió a vender publicidad, gestionar pautas y hasta armar un gran escritorio en madera.
