Así lo aseguró el vicepresidente del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas de La Plata (CECIM), Hugo Robert, a Pulso Noticias. Expertos proponen la construcción de un buque para la pesca comunitaria, y así brindar una mejor alimentación en los comedores populares
El CECIM La Plata junto al Instituto Malvinas de la UNLP presentaron un proyecto al gobierno de la provincia de Buenos Aires para que acompañe con políticas públicas la pesca social y así poder garantizar alimento nutritivo a los sectores más vulnerables.
“Argentina es un país pesquero pero que mide los beneficios de la pesca exclusivamente por los números de la exportación y no se considera ganancia la buena alimentación y la enorme cantidad de fuente de trabajo que genera la pesca estratégica”, aseguró Hugo Robert a Pulso Noticias.
Argentina tiene un territorio marítimo de 6,5 millones de km2, reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aunque mucha superficie está cedida a otros países. Y exporta el 90% de lo que produce.
Según establece la Ley 24.922 del “régimen Federal de Pesca”, el Estado provincial y Nacional tienen el dominio de todos los recursos vivos del territorio marítimo con límite en la provincia de Buenos Aires. “Nosotros tenemos un proyecto que presentamos a las autoridades provinciales y charlamos con autoridades nacionales pero por ahora no hemos obtenido mayores respuestas que la vista del proyecto”, contó Robert.
La propuesta sugerida por los expertos solicita la licencia de un barco de 20 metros de largo, construido en el Astillero Rio Santiago, tripulado hasta por ocho personas, en el cual se puede pescar unas dos mil toneladas al año. Luego eso se fracciona en tierra, es decir, se limpia, se descama, se filetea y llega a los comedores.
“Con esas dos mil toneladas de extracción de pescado se le da de comer a todos los comedores populares de La Plata, Berisso y Ensenada”, recalcó Robert. A mismo tiempo que sostuvo que el pescado es de todos los argentinos por ley, “no es de las empresas”.
Según relató el vicepresidente del CECIM, el proyecto es numéricamente posible: “generaría lo que se denomina el circuito virtuoso de la pesca. No el circuito que ha creado la Argentina a lo largo de cinco décadas que es pensar solamente en exportar, sino que además de brindarle una comida saludable a los comedores populares se generan puestos de trabajo”.
Cabe mencionar que el año pasado el CECIM gestionó pescados para comedores de La Plata. En julio consiguió una donación de langostinos congelados para 2500 personas.
Cambio de paradigma
Desde el CECIM seguirán trabajando para que las autoridades correspondientes tomen la decisión necesaria para cambiar el paradigma de la pesca en nuestro país. “Hay que empezar a ver la pesca de otra manera, no solo como productora de divisas sino también con una visión social y de generación de empleo y de buena alimentación. Esa es la visión que nos está faltando”, aseguró Robert.
El artículo 27 de la Ley Federal de Pesca indica que parte de la cuota que se pesca puede ser otorgada a fines de alto interés social. “La verdad que creemos que hoy por hoy lo más alto interés social es poder darles proteínas a nuestros pibes en los comedores. Tenemos la ley, no hay que cambiar nada. Solo falta destrabar cuestiones burocráticas”, insistió.
En ese sentido, el ex combatiente quien sabe que no hay que regalar ni un pedazo de territorio marítimo y hay que defenderlo ante potencias como el Reino Unido de Gran Bretaña, afirmó que darles proteínas una vez a la semana a los comedores equivale a alimentarlos con harina.
Por último señaló que durante 10 años la Argentina exportó más con la pesca que con la ganadería. “Argentina se convirtió en un país exportador de productos primarios. En este caso, pescamos, congelamos, casi ni procesamos y exportamos. Y como los números de exportación son buenos, nos conformamos con eso”.
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