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miércoles 09-10-2024

Femicidio de Natalia Melmann: comienza el segundo juicio al expolicía Ricardo Panadero

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A 22 años del secuestro, violación y asesinato de la joven de Miramar, el cuarto policía partícipe Ricardo Panadero será juzgado en un nuevo juicio. Desde el año 2002 hay tres policías bonaerenses condenados a prisión perpetua, el “entregador” Fernández ya recuperó su libertad y aún falta develar la identidad del quinto ADN hallado en el cuerpo de Nati. Una cadena de impunidad que se mantiene por décadas

Entre tantas discusiones electorales, de candidatos y dolarización, suceden diferentes acontecimientos que afectan a la gran mayoría del pueblo, como, por ejemplo: la impunidad en los femicidios y en los casos de gatillo fácil. Hace 22 años que la familia de Natalia Melmann reclama justicia. La adolescente tenía 15 años cuando la madrugada del 4 de febrero de 2001 un grupo de policías bonaerenses la secuestraron, la llevaron a la casa de uno de ellos y después, a los cuatro días, la tiraron muerta en el vivero dunícola de Miramar.

Al año siguiente, con la lucha de la familia y amigues, la causa se elevó a juicio responsabilizando a tres policías: Oscar Echenique, Ricardo Anselmini y Ricardo “Mono” Suárez, quienes fueron condenados a “reclusión perpetua” por los delitos de “rapto, abuso sexual seguido de homicidio triplemente agravado”. No hubo dudas. Un testigo vio cuando la Policía Bonaerense la secuestró a la salida de un boliche, también lo confirmó Gustavo “El Gallo” Fernández, el “civil entregador” que fue condenado por los delitos de “homicidio triplemente calificado agravado y privación ilegal de la libertad agravada”.

Los expolicías Oscar Echenique, Ricardo Anselmini, y Ricardo “El Mono” Suárez.

Los peritos señalaron que fueron cinco los ADN encontrados en su cuerpo y uno de ellos tiene una compatibilidad importantísima con el expolicía Ricardo Panadero, quien actualmente se encuentra en libertad y enfrentará este nuevo juicio. Mientras que un quinto ADN aún no fue identificado.

Hacia 2001, en plena crisis económica y política del país, Ricardo Panadero era el comisario de Mar del Sur, un pueblo del partido de General Alvarado, ubicado a unos 16 km de la ciudad cabecera de Miramar. Luego de estar señalado como miembro partícipe del femicidio de Natalia, logró el sobreseimiento en el primer juicio en septiembre de 2002, y recién en 2018 fue acusado formalmente como coautor de “privación ilegítima de la libertad por el uso de violencia, abuso sexual agravado por acceso carnal y por el concurso de dos o más personas, y homicidio doblemente agravado por haberse cometido para lograr la impunidad de los coautores de un delito anterior”.

En ese juicio fue absuelto debido a que los jueces consideraron que no pudo acreditarse la acusación, aunque hubo pruebas contundentes que indicaban lo contrario. Por diversos motivos, el fallo fue apelado por la fiscalía y por el abogado de la familia de Natalia Melmann. El 13 de noviembre de 2019, la Sala III del Tribunal de Casación bonaerense anuló esa absolución y ordenó una nueva resolución.

El segundo debate judicial

Luego de las restricciones por la pandemia, hoy se da inicio al segundo juicio contra Panadero, en el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 4 de Mar del Plata conformado por los jueces Néstor Conti, Mariana Iriani y Juan Galarreta. La familia continúa exigiendo “verdad y justicia”, convocan para que los acompañen en los días de las audiencias, todas las mañanas desde las 9 hs.

Desde Pulso Noticias hablamos con su hermano: Nahuel Melmann tenía 17 años cuando su hermana estuvo desaparecida cuatro días y luego hallada en el vivero de la ciudad balnearia; hoy tiene 39, sabe que su vida cambió, pero se mantiene firme en la lucha: “Estamos esperanzados de que se termine con la cadena de impunidad”, dice días antes de que inicie el segundo juicio al cuarto expolicía.

“22 años es muchísimo tiempo, principalmente para quienes padecemos la impunidad, para Natalia, para nosotros como familiares, para la sociedad”, expresa Nahuel. Y recuerda que con Panadero ya atravesaron una situación de debate oral en 2018, tras lo cual el mismo sistema judicial declaró que se trató de una sentencia “absurda y sesgada”.

Para Nahuel, “todo tiene origen de cómo se fue trazando la investigación de toda la causa, ya que esto debería haber quedado todo resuelto en el año 2002 cuando se elevó la causa a juicio”. Y afirma que “los ADN que se encontraron en el cuerpo de Natalia fueron cinco, entonces el ministerio público fiscal y el sistema judicial debería haber agotado sus recursos para dar con los responsables, y elevar la causa con todos los imputados. Fue una falencia”.

“Los tiempos de la justicia resultan horroroso para nosotros como familiares de víctima”, indica Nahuel. “Todo esto que ocurre con el sistema judicial nos provoca un manoseo, una revictimización. Todo nos resulta muy oscuro”, dice.

“La realidad es que a 22 años la prueba se degrada, se diluye”, marca Nahuel, y asevera que hoy “dar con los testigos es cada vez más complejo, hay testigos que sufrieron apremios ilegales y por ahí no quieren brindar el testimonio que ya dieron”, aunque serán incorporados por lectura en el juicio. Él también sufrió amenazas, al igual que su padre, pero nada los detendrá.

Tribunales de Mar del Plata. Foto: Pulso Noticias

Durante esta semana transcurrirán diferentes testigos, entre ellos participarán los peritos que evidenciaron la compatibilidad de los ADN: hay un 97% de compatibilidad entre un bello pubiano del imputado y el hallado en el cuerpo de Natalia. “La prueba científica es muy concluyente”, subraya el hermano. Según fuentes judiciales se prevé que entre el viernes y el lunes se conozcan los alegatos.

“Nunca nos imaginamos que íbamos a revivir todo de nuevo, que se iba a desarrollar otro debate judicial contra esta persona”, dice el hijo mayor de los Melmann, y exige que todos “los responsables paguen por sus hechos”.

Impunidad al palo

“Hace unos meses estábamos discutiendo la necesidad de que los autores materiales que fueron hallados culpables a la máxima pena continuaran preso, siendo que son delincuentes de la peor calaña que pueden existir en la faz de la tierra”, remarca Nahuel.

GUSTAVO MELMANN PIDIÓ QUE LA JUSTICIA NO LIBERE A LOS ASESINOS DE SU HIJA

En julio de 2021 los expolicías Echenique y Anselmini solicitaron la libertad condicional pero luego de una audiencia de debate en las partes, la justicia de Mar del Plata rechazó beneficiarlos.

En esta ocasión no le concedieron la libertad condicional, sin embargo, desde el año 2012 vienen obteniendo beneficios como diferentes salidas transitorias, que los llevan a cruzarse con la familia Melmann en un pueblo de 30.000 habitantes. “Median intereses que desconocemos, pero suponemos en relación a lo que es la corporación de la policía Bonaerense, nos encontramos con situaciones que uno se queda perplejo”, expresa Nahuel y enfatiza: “Todo sigue socavando y nos afecta”.

Todavía falta develar quién fue la quinta persona involucrada en el femicidio de Natalia. La justicia ya cuenta desde dos décadas con el primer indicio científico, que es el ADN hallado en el cuerpo de la joven. Su hermano responsabiliza al Ministerio Publico Fiscal que no ha avanzado en la investigación para hallar a los verdaderos responsables, que eran funcionarios públicos de la provincia de Buenos Aires, y lo siguieron siendo durante varios años más. Panadero fue removido de la fuerza policial en 2017.

“Nosotros nos sentimos responsables de que los autores paguen de lo que han hecho, no por Natalia porque ya no está en este plano, pero sí para con la sociedad porque sabemos el peligro que representan estas personas”, concluye Nahuel.

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Pasan los años y la impunidad sigue intacta. También existe una cadena de favores y de encubrimiento corporativo en la institución policial que permite que los casos se repitan, y los familiares lidien toda su vida exigiendo justicia por sus hijas o hijos. Otro capitulo aparte merece el listado general de los policías que encubrieron a estos femicidas uniformados, y uno particular, que además volvió a ser una pieza fundamental en otro femicidio. Ricardo Triches, un policía exonerado de la fuerza por encubrir a los policías de Miramar, en 2015 era el secretario de Seguridad de Monte Hermoso cuando la joven Katherine Moscoso apareció violada y asesinada en un médano de esa ciudad.

La familia espera una sentencia favorable ante tantas pruebas que incriminan al expolicía como participe del rapto, violación y asesinato de Natalia, es decir, de un femicidio. Una caratula que no está señalada en el juicio como tal, a pesar de que pasaron diez años de incorpor esa categoría en el Código Penal. Aunque en la causa judicial no figure, lo que le hicieron a Nati fue un femicidio.

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Más conocida como “Tefa”, nació en Mar del Plata en 1989. Trabajadora de prensa, periodista y Licenciada en Comunicación Social (egresada de la UNLP). Buscadora de la aguja en el pajar: le apasiona el periodismo de investigación. Trabajó en prensa institucional, en diversos medios privados de La Plata, y colaboró en medios alternativos como ANRed. Actualmente escribe notas vinculadas a los derechos humanos, política y cada tanto entrevista a personajes de diversos territorios. También integra el área audiovisual, En Foco, como productora periodística. Siempre redactando con las gafas violetas puestas. Desde 2018 forma parte de la cooperativa Pulso Noticias, donde aprendió a vender publicidad, gestionar pautas y hasta armar un gran escritorio en madera.

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