En uno de los principales bastiones electorales del oficialismo no hubo acuerdo entre los principales dirigentes del radicalismo. No habrá internas ni lista de unidad
El oficialismo no podrá llevar lista de unidad en la provincia de Córdoba, uno de los bastiones electorales más importantes de Cambiemos. Allí, donde el presidente Macri obtuvo el 70% de los votos en el balotaje de 2015, los dirigentes del radicalismo no se pusieron de acuerdo e irán en listas separadas.
El primero en romper filas fue Luis Juez, quien apuesta por volver a la intendencia de la capital provincial. Esta mañana retiró a su partido de la alianza Cambiemos y anunció que se presentaría como candidato a intendente con lista propia.
En la misma línea política, el actual jefe del interbloque de Cambiemos en Diputados, Mario Negri irá con lista propia a la gobernación de Córdoba, secundado por el ex árbitro Héctor Baldassi.
Por otra parte, el intendente cordobés Ramón Mestre, quien venía reclamando internas en el radicalismo, formará parte de otra lista que llevará al jefe comunal de Bell Ville, Carlos Briner como candidato a vice y al ex titular de Arsat y familiar de Oscar Aguad, Rodrigo de Loredo, para sucederlo en la intendencia.
La preocupación invadió la Casa Rosada, desde donde se trataba de evitar la grieta. Ante la ruptura inminente la Mesa Nacional de Cambiemos se reunió esta tarde en Casa de Gobierno desde donde apenas instaron a hacer un esfuerzo por la unidad.
En este contexto ninguno de los principales candidatos de la UCR llevaría el sello de Cambiemos, aunque Mestre amagó con ocupar ese espacio ante la deposición de Negri. La división le allana el camino al actual gobernador, el peronista Juan Schiaretti, para ser reelegido en la gobernación de la provincia mediterránea.
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