Esta mañana empezó el proceso judicial que tiene como único acusado al exmarido de la profesora de educación física, quien la asesinó en julio de 2015, después de haberla sometido durante años a violencia psicológica y física
El Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 comenzó a juzgar esta mañana a Marcelo Núñez, por el femicidio de su exesposa Claudia Salgán, ocurrido el 8 de julio de 2015 cuando la asesinó tras haberla sometido durante años a violencia psicológica y física.
Se trata de una profesora de educación física que tenía en ese momento 40 años, era mamá de tres hijos y desde hacía cinco años había puesto su propio gimnasio en el barrio de Gorina, hasta que aquella mañana su exmarido, con quien todavía compartía la vivienda ubicada en calle 493 entre 132 bis y 133, la apuñaló y ahorcó. A las pocas horas falleció en el Hospital San Roque de Gonnet, sumando un nuevo femicidio en nuestra ciudad.
El año pasado, cuando se habían cumplido tres años del asesinato, la madre de Claudia, Florencia Cabrera, había relatado a Pulso Noticias que el gimnasio de su hija sigue funcionando con su nombre, y que eso le da fuerzas a toda la familia. Al lugar concurren muchas mujeres que sienten que allí pueden contar las situaciones de violencia que sufren o han sufrido en algún momento de sus vidas. “Algunas nos dicen que tienen vergüenza o miedo pero esto va a seguir sucediendo hasta que el Estado se haga cargo”, aseguró.
Cabrera, quien fue la primera en declarar hoy como testigo, recordó que su hija “era víctima de violencia psicológica y física”, como tantas otras mujeres que mueren en manos de sus exparejas. Además denunció la falta de políticas preventivas para estos casos, sumado a que “varias veces hemos ido a hacer la denuncia a la Comisaría de Gonnet, sin embargo nunca pudimos encontrar esos registros para aportar a la causa”.
En ese sentido, la abogada de la familia de Claudia, Sofía Caravelos, había explicado a este medio que la causa fue elevada a juicio por el delito de femicidio, por el artículo 80 inciso 11 del Código Penal, “una calificación que desde el primer momento los defensores del imputado cuestionaron pero que justamente fue la Cámara de Apelaciones la que fue sosteniendo que Claudia fue asesinada en un contexto de violencia de género aunque no existieran denuncias anteriores” de manera formal. Es decir, la Comisaría de Gonnet no tenía los registros de las denuncias realizadas por Claudia.
Sin embargo, en este caso, la Cámara entendió que “toda la situación previa a la muerte y el modo en la cual se desplegó esa violencia del imputado contra su expareja dan cuenta de que efectivamente la muerte se produce en ese contexto”, señaló la letrada. Ahora, estos argumentos están siendo expuestos en el juicio, que finalizará este miércoles, cuando se espera que se anuncie la sentencia.
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