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jueves 28-03-2024

Sin políticas para la niñez: abandono y respuesta punitiva

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Trabajadores del Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia venían denunciando desde hace meses el deterioro y desmantelamiento de la manzana de 66 y 9, donde funcionaban varios programas y un hogar que fueron cerrados. Allí, jóvenes en situación de vulnerabilidad seguían frecuentando el lugar. En vez de mandar profesionales les enviaron a la policía

Trabajadores el Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia (OPNyA) vienen denunciando desde hace meses el abandono en que se encuentra la manzana ubicada en 66 y 9, donde solía funcionar el Hogar Materno Infantil Arrullos, que fue cerrado en diciembre de 2017 bajo el argumento de que se iban a realizar reformas edilicias, y todavía permanece cerrado, desprotegido y en franco deterioro.

Allí, niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad continuaban frecuentando las instalaciones, pasando las noches incluso, con el peligro que eso significa, en medio de la falta de respuestas del Estado, la reducción de los programas que deberían asistirlos, y la precarización laboral en los que todavía se mantienen en pie.

A principios de la semana pasada, tras denuncias de vecinos sobre supuestos ilícitos que estos jóvenes estaban cometiendo, la decisión del OPNyA fue finalmente intervenir. Sin embargo, no lo hicieron con las herramientas con las que justamente el organismo cuenta para asistir a personas en esa situación. Directamente mandaron a la fuerzas de seguridad, montando un importante operativo que terminó con 11 jóvenes detenidos (ocho menores y tres mayores).

“Se montó un operativo terrible con itacas, armas, escopetas, generándose situación muy violenta, incluso los esposaron. Entraron hasta en las instituciones que todavía están funcionando en la manzana, para ver si estaban los pibes ahí”, relató a Pulso Noticias Gonzalo Agüero, delegado gremial de ATE Niñez y trabajador del programa Autonomía Joven, uno de los pocos que sigue funcionando en el predio.

“Nosotros advertimos que este lugar estaba siendo abandonado, que había indicios de estar ocupado, que ya había denuncias de los vecinos, e incluso del riesgo que presentaba para los mismos pibes. Es un lugar abandonado, un edificio en el que puede pasar cualquier cosa, una tragedia”, agregó.

Sin embargo, insistió en que la gestión del organismo “no tuvo una respuesta oportuna. Llamó a la policía en reiteradas oportunidades. Nosotros pedíamos que pusieran un sereno o que realmente empezaran el trabajo de refacción en el lugar para habilitarlo nuevamente, además de políticas que vuelvan a incluir a estos pibes en el sistema, porque están en situación de calle y no hay una respuesta concreta ante esa problemática”.

Agüero explicó que en el programa del que forma parte trabajan con jóvenes institucionalizados en hogares. Aunque “en este último tiempo se fue dando la situación que tiene que ver con que los pibes y las pibas, se autoegresaron de los hogares. Un egreso unilateral se llama, es decir que abandonan la medida”, ya sea firmando su salida o directamente escapándose del lugar.

“Sin embargo esos pibes siguen acercándose al programa, porque nosotros entendemos que siguen siendo chicos del organismo de Niñez, aunque las autoridades digan que no. El Organismo se resguarda en que los pibes firmaron un egreso unilateral, entonces se hacen responsables por sí solos”, remarcó y explicó que aunque sea “haciendo malabares” los trabajadores del programa buscan mantener el vínculo. Algunos de estos jóvenes son los que seguían frecuentando ese predio por las noches.

La lógica punitiva

“Queremos dejar en claro que el organismo de Niñez debe y tiene otras maneras de actuar. Y si actúa tarde, no debe ser con la policía, cuando hay operadores de niñez, operadores de calle, con otras maneras de intervenir. La respuesta del Organismo con un claro sesgo punitivista, queda por fuera de los objetivos de incluirlos en políticas públicas y que realmente modifiquen algo de la vida de los pibes”, explicó Agüero.

Pero claro, basta ver el desmantelamiento progresivo de los programas que funcionaban en el predio para tener dimensión de la evidente disminución de recursos para una población juvenil cada vez más vulnerable, producto -entre otras cosas- de que es el sector más afectado por los índices de pobreza, que siguen en aumento según muestran las propias cifras oficiales.

“En esa manzana funcionaban varios programas que esta gestión decidió cerrar. Yo antes trabajaba en el Centro Terapéutico Diurno (CTD), donde se realizaban talleres terapéuticos y artísticos, ese se cerró en marzo del año pasado. Otro llamado Sostenimiento de la Crianza fue desmantelado y cerrado también en la misma época. Esto se debe a la jubilación de personal, retiros voluntarios y a que no hubo reposición de esos puestos laborales”, señaló y apuntó: “Hay que tener en cuenta que en el Organismo de Niñez tenemos más de 600 vacantes que están congeladas, porque no hay ingresos. Después, sí hay ingresos de personal pero contratado en condiciones ultra precarias, que no tienen ningún derecho, cobran el sueldo de forma retrasada, entre otras cosas”.

El delegado gremial indicó que para ATE Niñez esta política no es casual y va en línea con el debate que impulsa el Gobierno en el Congreso Nacional en torno a la baja de la edad de punibilidad.  “Esta gestión no invierte en políticas públicas y pretende encerrar a los pibes, criminalizarlos. Que la policía haya intervenido en varias oportunidades, tiene que ver con un contexto más general, que tiene que ver con esto, con promover que actúen las fuerzas de seguridad cuando ya es tarde, cuando los pibes tienen que llegar a situaciones extremas de vulneración y no hay políticas anteriores que eviten eso”, concluyó.

Periodista y Licenciado en Comunicación Social. Sagitario en casa diez, ascendente en Piscis y luna en Capricornio. Buena mano para el mate. Trabajó en Infoanpress; diario Hoy; Agencia La Provincia; revista Avanzada Sindical; revista La Tecla y colaboró en ANRed. Escribe en secciones como Política, Derechos Humanos, Interés General y Socio Ambiental. Un poco sindicalista. No es tímido, nomás le cuesta entrar en confianza.

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