El 28 de junio del 2006 declaró en el juicio que se realizaba contra el genocida Miguel Etchecolatz. Hoy colocaron un busto en frente a la UPA N° 6 de Los Hornos, barrio donde vivió y militó. El mismo testimonio se reprodujo en mayo en el denominado Juicio Garachico
El albañil Jorge Julio López, sobreviviente de la última dictadura cívico-eclesiástico-militar y desaparecido por segunda vez el 18 de septiembre de 2006 -tres meses después de testificar contra el genocida Miguel Osvaldo Etchecolatz– fue homenajeado hoy con un busto en la Unidad de Pronta Atención (UPA) Nº6 de Los Hornos, barrio donde vivió y militó.
El monumento se inauguró esta tarde porque se cumplieron 16 años de su declaración en el juicio que se seguía contra el exjefe de la Dirección General de Investigaciones de la Policía. Fue un testimonio fundamental para lograr una condena ejemplar en el marco de la figura de genocidio.
López pudo identificar al represor como quien participó del operativo en el que fue secuestrado a fines de octubre de 1976, junto a otros militantes peronistas de una unidad básica de Los Hornos, y como uno de los que les aplicaba torturas a él y a otros detenidos en el centro clandestino de Arana.
Tres meses más tarde, el 18 de septiembre de 2006, López salió de su casa, en Los Hornos, para dirigirse al Salón Dorado de la Municipalidad donde se desarrollaba el juicio y debían oírse en esa jornada los alegatos finales. Pero nunca llegó al edificio municipal, permaneciendo desaparecido hasta la fecha. La investigación sobre el caso continúa sin avances concretos ni personas detenidas.
Un testimonio vigente
La última vez que se volvió a escuchar el testimonio de Jorge Julio López en un juicio de lesa humanidad fue el 13 de septiembre del año pasado, en la segunda audiencia por el denominado juicio “Garachico”, en el que se juzgó al ex Comisario Inspector de la policía bonaerense Julio Cesar Garachico y al mencionado Etchecolatz.
El Tribunal, las querellas, las víctimas y los represores volvieron a escuchar a través de la reproducción de un video el relato propio de los padecimientos del albañil de Los Hornos cuando estuvo alojado en Arana, las torturas, con quiénes cumplió cautiverio y la descripción de cómo fueron ejecutados Patricia Dell’Orto y su esposo Ambrosio De Marco.
“Patricia (Dell’Orto) le gritaba ´no me maten, llévenme a una cárcel pero no me maten, quiero criar a mi nenita, mi hija´ y ellos no, la sacaron. Y van a ver ustedes si algún día encuentran el cadáver o la cabeza, que tiene el tiro metido de acá y le sale por acá… Buum otro tiro”, gritaba López aquel día mientras señalaba el centro de su frente.
El pasado 13 de mayo se dictó el veredicto en este juicio, que contó con la cobertura especial y de manera conjunta entre Pulso Noticias y La Retaguardia. Cerró con trago amargo para los organismos de derechos humanos, las querellas, familiares y militantes: el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de La Plata N°1 sentenció a cadena perpetua a ambos expolicías bonaerenses, pero denegó la prisión efectiva para Garachico, permitiendo que quien formó parte de la patota en Arana, siguiera en prisión domiciliaria en su casa en Mar del Plata.
Un quiebre
“Fue un quiebre para nosotros como familias, pero también para la sociedad”, señaló Rubén López, hijo de Jorge Julio, a Radio Provincia horas antes de la colocación del busto en homenaje a su papá, en referencia a la segunda desaparición forzada del albañil.
En ese marco, agregó: “Los años pasaron muy rápido, estos 16 años han sido duros, difíciles, pero siempre tengo convicción, y esto se construyó, en la UPA, que es construir memoria”.
Somos un medio de comunicación cooperativo que se conformó luego de los despidos ilegales en el diario Hoy y en la radio Red 92 de La Plata, sucedidos a principios de 2018.
Sin laburo y con la intención de mantener nuestros puestos de trabajo, un grupo de periodistas, correctorxs, fotógrafes, locutorxs, productorxs audiovisuales y diseñadorxs decidimos organizarnos de forma colectiva.