Cultor de un estilo reconocido y sofisticado, el cantante se presenta esta noche en la Estación Provincial. El show, el rol de la cultura y sus recuerdos de La Plata en los años 80, en esta charla con Pulso Noticias
“En los 80 La Plata era una explosión”, dice Sergio Pangaro del otro lado del teléfono, y recuerda. Allí estaba él, que se formó en nuestra ciudad, construyendo talleres, haciendo teatro, recuperando clubes barriales, siendo parte de esa juventud que aún hoy le da vida a la cultura platense. Y hoy, justamente, Pángaro vuelve a las diagonales, después de muchos años, para dar un recital organizado por C´est La Vie en La Estación Provincial (17 y 71) a partir de las 21 horas. Antes, habló con Pulso Noticias de política, de la escena musical y de sus proyectos, que lo tienen como siempre rotando entre el cine, la música y la literatura.
“Hace un montón que no voy (a La Plata). Fueron pasando los años, y es una pena porque es mi ciudad, ahí me formé e hice el colegio”, dice el artista, que a lo largo de su carrera construyó un estilo propio: siempre de gala, representando la música de los años 40 o 50, innovando desde lo vintage, cuando lo antiguo no era moda. Porque en su vida y en su música, hay mucha historia por contar.
En la charla, sus recuerdos platenses vuelven una y otra vez: “Para los gobiernos autoritarios, la juventud que se forma es un foco temible, por eso fue muy fuerte la represión ahí. Imaginate toda esa juventud que había sobrevivido al terror, teníamos toda la fuerza. Recuerdo que fundamos un teatro en 68 y 8, rescatamos un club de barrio y dábamos cursos, obras, hacíamos música tocando en bares”.
En los 90, en cambio, algo se perdió, hubo un vacío cultural donde todo era copia, tributo, y nada de experimentación. Ganó el imperio de lo comercial, pero él siempre resistió: “buscábamos experimentar, hacer otro tipo de cosas”, insiste. Por eso, hoy ve con entusiasmo la escena musical juvenil, que se anima a nuevos géneros. El rap, el trap y la fusión. Así lo explica Sergio: “Soy simpatizante de todo lo que sea correrse del mainstream. En un momento esto era un gesto alternativo, pero hoy es casi una necesidad. El mainstream es casi la única propuesta de cultura que hay, y se castiga lo diferente. Por eso la alternativa tiene un efecto político”.
Pángaro no le rehuye a los temas. Piensa las palabras, se toma su tiempo para responder, reflexiona. Para él, la política partidaria es quedarse corto, pues “más allá de los momentos históricos, el arte, la cultura, siempre aportó a la humanidad. El artista es un actor político sin ambiciones de poder”.
Sin ambiciones pero con expectativas, esta noche Sergio Pángaro se presentará junto a Os Párpados, algunos de cuyos integrantes formaron parte de Baccarat. Viejos conocidos, compañeros de ruta, la propuesta incluye un repertorio amplio y variado, que recorrerá la carrera del cantante. Siempre desde el under, cultor de un perfil sofisticado, ganó numerosos premios y no sólo con la música. Un cóndor de plata y la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas lo reconocieron por su papel en la película El hombre de al lado.
Pero además, Sergio escribe: el año que viene publicará la biografía de su maestra de canto, “una vida de aventuras” que le sirve como excusa para hablar de todo lo que le interesa: la historia, el arte y sus relaciones.
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