El oficial de 26 años fue aprehendido tras confirmar que fue una farsa la denuncia realizada el pasado 12 de agosto, la cual tenía como objetivo insertar su pistola en el mercado negro
El efectivo policial platense Ezequiel Nahuel Garzo había denunciado que el domingo 12 de agosto, cuando se dirigía a cumplir con su servicio en la Comisaría Tercera de Dorrego en el partido de La Matanza, fue increpado por un vehículo del cual se bajaron tres personas obligándolo a que les diera el arma, y ante su resistencia le efectuaron tres disparos que impactaron en el chaleco antibalas y no le causaron ninguna herida, “pero sí un efecto traumático, el cual fue aprovechado por uno de los delincuentes para robarle la pistola reglamentaria y darse a la fuga”.
Sin embargo, según afirmaron fuentes policiales, “la veracidad de la historia cambió rotundamente cuando los investigadores de la Comisaría Segunda y de la Subcomisaría de Gorina, dependientes de la Jefatura Departamental de la ciudad de La Plata, pudieron constatar mediante la obtención de registros fílmicos de varias cámaras de seguridad ubicadas donde ocurrió el supuesto hecho, sumado a los testimonios recabados, que nada de lo expuesto y denunciado por el oficial de Policía había sido cierto, confirmando la sospecha con el hallazgo del arma en cuestión”.
En ese sentido, los investigadores confirmaron que todo fue una farsa para encubrir la venta de su pistola en el mercado negro. La causa, caratulada en un principio como “robo calificado y tentativa de homicidio”, pasó a caratularse como “falsa denuncia”. Así lo avaló la UFI N° 11 a cargo de Álvaro Garganta. El policía Nahuel Garzo fue aprehendido y secuestraron la pistola marca Bersa Thunder calibre 9mm. En tanto, la Auditoría General de Asuntos Internos, encabezada por Mariano Santana, dispuso la desafectación de la fuerza de seguridad del imputado.
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