Las jugadoras y el cuerpo técnico del Club Capital Chica de Los Hornos anunciaron su alejamiento de la institución tras denunciar “discriminación y violencia” con el plantel. Sin consultarles les duplicaron la cuota y pretendieron dejar afuera a aquellas que no pudieran pagarla. El año pasado habían logrado el ascenso
Las jugadoras y el cuerpo técnico del Club Capital Chica de Los Hornos, que el año pasado habían salido campeonas del torneo liguista alcanzando el histórico ascenso, anunciaron su alejamiento de la institución tras denunciar “discriminación y violencia” hacia el plantel.
“Como actuales jugadoras y Cuerpo Técnico de Juvenil de La Plata queremos expresar nuestro profundo dolor por todo lo acontecido desde que retomamos nuestra pretemporada el 4 de febrero”, señalaron a través de un comunicado firmado por el cuerpo técnico, jugadoras, padres, madres, y familiares.
En el texto señalan que iniciaron el año “con el entusiasmo y el enorme desafío de disputar la más alta categoría de la Liga Amateur Platense; es así que Cuerpo Técnico, compartiendo con jugadoras y padres/madres dicho compromiso, planificamos nuestra pre-temporada”.
“La Comisión Directiva del club decidió sin ningún aviso, ni consulta previa a nadie del Fútbol Femenino, duplicar la cuota de las jugadoras (mayores, juveniles e infantiles), pasando las cuotas de mayores a $1100 y de infantiles y juveniles a $850, debiendo además afrontar los gastos de adherencia a la liga, los costos de referees y enfermeros/as y cualquier otro gasto que surja. Las jugadoras debían afrontar una cuota elevadísima y además generar con iniciativas propias del Fútbol Femenino presupuesto para cubrir todos los costos. No es casual que la cuota de infantiles femenino es de $850 en jugadoras mujeres y los niños varones pagan $650, siendo este un claro caso de violencia y discriminación”, remarcaron.
Además, informaron que mantuvieron “en estas últimas semanas reuniones para intentar continuar con nuestro proyecto deportivo pero no pudimos llegar a un acuerdo que permita que las 50 jugadoras puedan continuar en el club. Presentamos alternativas que permitieran bajar la cuota, que generarían ingreso al club desde otro lugar (más allá del bolsillo de las jugadoras y familia del fútbol femenino). En esas semanas vimos como jugadoras de infantiles y juveniles no podían pasar a entrenar porque no tenían la cuota al día, siendo la entrada prohibida por un seguridad. El club nos daba la espalda ante cada alternativa que les presentamos: torneo relámpago, posibilidad de alquilar un predio de 11, búsqueda institucional de sponsors”.
“Nunca nos imaginamos un fútbol sin nosotras en él, nunca concebimos la ida de que alguna piba se quede afuera de este proyecto por el factor económico, jamás se nos ocurrió que tendríamos que enfrentarnos a una decisión tan difícil por todo lo que conseguimos”, señalaron.
Además, afirmaron: “Queremos jugar, queremos seguir usando el fútbol como herramienta colectiva de transformación de nuestra realidad, queremos que nuestras pibas vengan y tengan este espacio y este proyecto colectivo siempre con sus puertas abiertas. Nos fuimos porque no compartimos más los ideales del proyecto. Ellos van por otro camino. No queremos otra cosa que jugar, todas juntas, como siempre lo hicimos”.
“Llamamos a la reflexión a quienes hoy pretenden que ninguna jugadora pueda continuar jugando al fútbol en Juvenil La Plata. Ya no formamos más parte del club que aprendimos a querer, no pretendan también quitarnos el espacio conquistado, jugar al fútbol, que tanto nos costó”, concluyeron.
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