Hablamos con José “Pepe” Rusconi, referente vecinal de Barrio Norte, acerca del primer encuentro del Mirador Ciudadano del Patrimonio Cultural y Natural Regional, que busca atender diversas problemáticas profundizadas en los últimos años en La Plata y la región
Este domingo se realizó el primer encuentro del Mirador Ciudadano del Patrimonio Cultural y Natural Regional (La Plata, Berisso y Ensenada). Se trata de un espacio amplio, multidisciplinario, con diversidad ideológica y “preocupado en trabajar y luchar por lograr que las ciudades de la región tengan una mejor calidad de vida”. El mirador está conformado por organizaciones como SOS Adoquines, Al Rescate del Patrimonio, Vida Árbol y distintas Asambleas de Inundados de la ciudad, entre otras organizaciones.
En diálogo con La Primera Maraña, programa que coproducen Pulso Noticias y Radionauta, el referente de la Asamblea Vecinal Barrio Norte y víctima de las inundaciones de 2002 y 2013, José Pepe Rusconi, señaló respecto al Mirador: “Estamos trabajando por diversas problemáticas que hacen a la ciudad, como las inundaciones, el adoquinado en peligro, el ataque al patrimonio y al arbolado público, entre otras. A mi entender, el desafío es tratar de que nuestra ciudad vuelva a tener una calidad de vida como la tuvo en otro tiempo y que nos merecemos tanto los platenses, como la región toda”.
En relación a la organización que se vislumbra para hacer frente a estos desafíos, Rusconi sostuvo: “La ciudad ha sido devastada. La idea es ver si entre todos podemos en principio frenar toda esta situación de avance sobre nuestro patrimononio. Y a partir de ahí, recuperar algo de lo perdido. Formar este colectivo hace que no nos sintamos solos; que podamos apoyar nuestras luchas y fortalecernos mutuamente. Los momentos sociopolíticos no los definimos nosotros, los define la marcha de la sociedad. Hay que estar siempre preparados para, cuando lleguen esos momentos, poder trasladar experiencias a otros que se sumarán. Con mucha paciencia”.
―¿Que perspectiva tenés de cara a la nueva gestión que se viene, encabezada por Julio Alak?
―No es alguien nuevo, por supuesto. Durante el anterior gobierno de Alak se dio la inundación del 27 de enero de 2002, y algunas más. Ahí empezó nuestra lucha, con reclamos hacia su gestión. En esta nueva etapa, si bien hemos sido muy críticos con él, eso no quita que intentemos tener un diálogo, a ver qué está dispuesto a hacer ahora de lo que no hizo en otro momento. Somos prudentes, no generamos expectativas más allá de las posibilidades que vemos, pero tampoco cerramos puertas al diálogo.
En ese sentido, el referente vecinal se refirió a una de las últimas luchas relacionadas a la defensa del espacio público y causó mucha polémica con la gestión de Julio Garro: la cementación de espacios verdes. “Es algo muy dañino. Son terrenos de absorción que se pierden. Pero no solo eso: se han perdido la fisonomía, los espacios de oxigenación, de esparcimiento, bajo una modernización engañosa de la ciudad. Hay que ver como ahora se da respuesta a ese reclamo”.
En relación al nuevo escenario que se vislumbra después de las elecciones del 19 de noviembre y cómo ello impactará en la lucha de las organizaciones, Rusconi explicó: “Sabemos que entramos en una etapa de gran ajuste. Después de las elecciones se va a manifestar con mucha más claridad. Venimos de épocas difíciles, y hay temas que particularmente a los inundados nos preocupan, que implican inversiones muy grandes. No nos ilusionamos con que van a salir facilmente, pero vamos a intentar. Y hay otras que no requieren gran inversión, y ahí la vamos a pelear mucho más”.
―¿Cuál es la importancia de valorizar lo colectivo en un contexto en el que algunxs reivindican el individualismo?
―Se plantea con muchísima fuerza la necesidad de estar organizados, más en estos momentos en que afloran discursos negacionistas de todo tipo, entre ellos el de las problemáticas ambientales. En la medida que fortalezcamos las organizaciones vecinales que defienden a la ciudad, vamos a estar mejor preparados. La organización es fundamental y será fundamental en los tiempos que vienen, que no serán nada fáciles.
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