El miércoles hubo protesta en las puertas de la fiscalía para pedir justicia. Desde Pulso hablamos con la pareja de la víctima, con una amiga, con una “hermana del corazón” y con una referenta del colectivo trans. Aquí una descripción del círculo de violencia y un perfil de la chica trans asesinada.
En la noche del 23 de septiembre Nicol Ruiz, mujer trans de 36 años, fue brutalmente agredida por Daniel Sivestrelli en La Plata. Al comienzo, la chica trans quedó internada en el Hospital San Martín, pero durante el fin de semana falleció, tras los golpes recibidos y en contexto de una situación de vulneración de su estado de salud previo.
Por eso, desde las agrupaciones feministas y de apoyo trans, junto a sus familiares se organizaron para protestar y pedir respuestas de la justicia el miércoles al mediodía en las oficinas de la justicia en 7 entre 56 y 57.
Allí desde Pulso Noticias hablamos con Edgar, quien era pareja de Nicol, en un visible estado de tristeza. También escuchamos las declaraciones de Karen, una “hermana del corazón”, quien la chica trans fallecida había prácticamente adoptado como parte de su familia y recibido en su casa, cuando esta chica tenía 16 años y una bebé. Por otra parte entrevistamos a Agostina Curuchet, amiga y abogada de la víctima, y algunas declaraciones de Claudia Vázquez Haro, referente política de un sector del colectivo trans travesti.
Adoptar a una mamá de 16 años
Karen fue quien accedió primero a los medios de comunicación presentes en la vereda de la Fiscalía. Muy triste contó que el agresor ya está detenido y que ellas se encontraban esperando que alguien las atienda y que se haga justicia. Pero detalló que Sivestrelli ya había estado detenido 3 o 4 veces y que “siempre fue un violento”.
También, al momento del miércoles a las 15hs, todavía estaban esperando el cuerpo de Nicol para velarla y enterrarla. El detalle de la agresión está contextualizado en que el asesino de Nicol se encontraba en pareja con una hermana de ella, en una relación de violencia y agresividad que Karen aseguró con diferentes ejemplos. “Siempre le pegaba, ella nos decía que no porque no nos quería preocupar, por eso Nicol siempre la defendía”, intento describir entre la pareja del agresor y la defensa a la que siempre acudía la trans asesinada. “Era un círculo de violencia, por eso Nicol siempre estaba detrás de su hermana porque era la más chica, la más vulnerable, incluso Daniel tenía armas de fuego y la amenazaba”, recordó.
Finalmente Karen contó que conoció a Nicol: “Ella me adoptó con 16 años y mi hijo de 2 meses. No me conocía y me llevó a su casa. Cuando yo no tenía a nadie, apareció ella, ella nos enseñó que una tiene que luchar. no tiene que tener miedo”. Además relató que la víctima se encontraba atravesando un estado de salud muy sensible, haciéndose diálisis y esperando un trasplante. “Murió como una guerrera, defendiendo a su hermana, ella quería que todos tengan el mismo derecho, fue una persona valiente”, cerró Karen.
El ataque y el círculo de violencia
Por otro lado, Edgar era actualmente la pareja de Nicol. Él, con tono guaraní, silencios y voz baja de tristeza y congoja, respondió con pocas palabras las preguntas de la periodista de calle de Pulso Noticias. En la charla contó que Nicol fue a saludar a su hermana a la casa y se encontró con que la pareja le estaba pegando, con lo cual se metió a defenderla y recibió como respuesta la terrible agresión, que incluyó palazos en la cabeza. Allí su hermana llamó a Edgar y le dijo que “habían chocado con la moto”, así que la fue a buscar. “Nicol me dijo que la llevara a mi casa, que quería acostarse, y tenía mucho dolor de cabeza así que la llevamos a la guardia”, previo hacer la denuncia en la comisaría, según contó recordando lo que había pasado cuatro días atrás. Pasaron unos minutos nomás para que los profesionales de la salud le dijeran que iban a tener que operarla de urgencia. Luego de dicha intervención y tras pasar 48hs, Nicol perdió la vida.
Pero además, agregó que el agresor, Daniel Sivestrelli, estaba aguardando a Nicol en el Hospital también. En un principio la hermana de la víctima no contaba la realidad, hasta que en un momento se quebró y contó cómo había sido el ataque, con lo cual el agresor terminó escapando del Hospital, y también días después fue capturado por la DDI.
“Nicol tiene una hija, está destrozada”, finalizó Edgar, que también se lo observaba en estado de shock.
Otra trava solidaria y luchadora
Agostina Curuchet es amiga del Nicol, y es coordinadora de la defensoría LGBT de Provincia. Es abogada con lo cual la chica asesinada le hacía consultas cotidianamente. “Nos conocimos con Nicol porque ella siempre estaba atrás de quienes lo necesitaban, y me llamaba para solucionar todo lo que iba pasando. Es muy triste, no puedo creer que no esté, era una luchadora. Aun con su estado de salud, haciéndose diálisis todas las semanas, esperando un trasplante de riñón, se subía a la moto y repartía mercadería, ayudaba a su familia, a sus hijes, iba a las marchas, no paraba un segundo”, describió desconsolada.
Finalmente confirmó que el agresor se entregó y que desde la Defensoría pidieron participar en la causa y el cambio en la carátula: “Que sea por travesticidio, ahora está en homicidio simple”, explicó.
“Todos sabían su estado de salud, estaba muy flaquita, el tipo sabía lo que estaba haciendo. Fue por ese estado que se complejizó la cirugía, no tenía defensas, cualquier golpe le podía ocasionar lo que pasó, y el asesino lo sabía”, concluyó.
La agenda emocional del país
Claudia Vázquez Haro es referenta de la organización OTRANS. Participó de la concentración en pedido de justicia por el travesticidio y también pidió que se juzgue en los términos del agravante por odio a la identidad de género.
Finalmente deseó: “Queremos ser parte de la agenda emocional de nuestro país, que la sociedad se enlute por la muerte de travestis trans, que la sienta propia, que se genere mecanismos para combatir y erradicar el odio que se lleva la vida de muchas otras compañeras”.
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