Justo cuando caía la tarde, Bamba y Sebastián fueron liberados. Estaban demorados en una reducida celda de la Comisaría Primera de la ciudad junto con 12 personas más, por lo acontecido en el centro el lunes temprano.
“No tendríamos por qué haber estado presos”, dijo Sebastián, trabajador no docente de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata a Pulso Noticias. “Pero así son las cosas”.
“Si mañana vuelven a querer levantarle la mercadería a un compañero me van a volver a llevar preso, porque yo siempre voy a defender a mis compañeros”, explicó Bamba, un vendedor ambulante de origen senegalés que ayer fue uno de los protagonistas del momento de tensión ocurrido en 7 y 47, cuando efectivos de la Policía Local se dispusieron a decomisar los productos de los vendedores apostados en esa esquina. La situación no tardó en tomar otro tenor cuando los senegaleses se resistieron a que les sacaran su mercadería y muchos transeúntes que circulaban por la zona se manifestaron defendiéndolos.
“Lo único que tengo acá es a mis compañeros y a mi familia, pero la Policía no se cansa de perseguirnos porque dice que somos traficantes”, expresó Bamba con cansancio. Es que el joven permaneció demorado más de 28 horas por los delitos de “lesiones y resistencia a la autoridad”. Su compañera le llevó una frazada para que tuviera con qué abrigarse por la noche, pero igual salió temblando de frío.
La fiscalía a cargo de Hugo Tesón los liberó luego de constatar que “no existieron agresiones hacia la Policía por parte de los detenidos”. La mayoría de las pruebas fueron aportadas en forma de videos por los espectadores y los mismos feriantes que presenciaron los hechos en pleno centro platense.
“Creo que hay que organizarse, esto no puede seguir así, pedimos trabajo y nos reprimen o nos llevan presos”, argumentó Sebastián.
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