El Concejo Deliberante dio el visto bueno para incrementar la bajada de bandera de $24 a $30, y la ficha de $3 a $3,50. La suba terminó siendo levemente menor a la planteada originalmente por las entidades representativas del sector, que afirman que los costos les aumentaron más del 67%
Siete días después de que la Comisión de Transporte empezara a analizar los pedidos de la Asociación de Propietarios de Taxis (APT) y de la Unión de Conductores de Taxis (UCT) para incrementar la tarifa de los viajes, el Concejo Deliberante aprobó hoy en sesión extraordinaria un aumento de $24 a $30 en la bajada de bandera y de $3 a $3,50 en la ficha.
La suba es levemente menor a la planteada originalmente por ambas entidades del sector, que pretendían que la ficha subiera hasta $4. De esta forma, el impacto promedio en los viajes será de alrededor del 22%, dependiendo de la extensión del trayecto.
Una sola concejal se abstuvo en la votación, la radical Florencia Rollié, argumentando que no necesariamente el aumento de la tarifa iba a redundar en la mejora de la situación de los conductores ya que podría mermar aún mas la cantidad de viajes, y que además es un perjuicio mayor para los usuarios.
Por su parte, el edil Cristian Vander (FPV-UC) intervino para reclamar mayores controles al transporte ilegal por parte de la Municipalidad y de la informalidad laboral por parte del Ministerio de Trabajo. Ambos temas fueron planteados por la UCT en la reunión de Comisión de Transporte, ya que aseguran que los remises truchos y los autos que se desempeñan a través de la aplicación UBER hacen mermar las posibilidades de trabajo de los taxistas. “Si se reduce el transporte ilegal, los trabajadores de los taxis se van a sentir más apoyados, aumentará su trabajo, y el cliente no va a tener que andar pagando incrementos tarifarios cada dos por tres”, señaló el concejal.
En tanto, el oficialista Julio Irurueta defendió a la gestión comunal al afirmar que “desde el Municipio seguimos con nuestro compromiso para dentro de nuestras posibilidades, seguir combatiendo el transporte ilegal en todas sus formas”. A lo que luego agregó: “le quiero pedir a todos los sectores que componen el servicio de taxis que sigamos trabajando juntos por la mejora en la calidad del servicio que se presta, principalmente haciendo hincapié en la atención que se le presta a las personas con algún tipo de discapacidad”.
Cabe recordar que en octubre, los taxistas habían pedido un segundo aumento tarifario (habían tenido uno en febrero de 2018) ya que existía un compromiso del cuerpo deliberativo para evaluarlo, pero finalmente fue descartado sobre el cierre del periodo legislativo. A cambio, el Concejo Deliberante había aprobado en noviembre el proyecto permite que los coches puedan llevar publicidad en el techo, la luneta trasera y en la parte de atrás del asiento del conductor, aspecto que ya se ha comenzado a implementar. Sin embargo, la situación económica del sector no mejora, sus costos aumentaron un 67,5% y por esta razón volvieron a insistir con el incremento de la tarifa.
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