A partir de hoy en los puestos verdes ya no habrá ejemplares para repartir. Ayer el edificio donde funcionaba la redacción amaneció cerrado con cadena y candado. La página web no funciona desde el sábado. Su dueña, Myriam Chávez de Balcedo, procesada con detención domiciliaria por formar parte de un entramado delictivo, decidió cerrar las puertas. Más de 200 personas le reclaman salarios adeudados e indemnizaciones
Esta vez es en serio. Ya no se trata de un cierre provisorio de cuatro días como se intentó realizar el 18 de enero de este año, momento en el que la patronal que conduce el diario Hoy buscaba despedir al 60% de la redacción pero se topó con la resistencia de sus trabajadores y trabajadoras. Ahora todo indica que se trata del final, al menos bajo la conducción de la familia Balcedo, que tiene a sus máximos exponentes procesados y detenidos.
El segundo medio gráfico más importante de la ciudad iba camino a cumplir 25 años el próximo 10 de diciembre, pero… pasaron cosas. Desde el 4 de enero cuando el entonces director del medio y además secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de Minoridad y Educación (Soeme), Marcelo Balcedo, fue detenido junto a su esposa Paola Fiege en su fastuosa mansión en Uruguay, el diario comenzó a experimentar un lento pero sostenido derrumbe, como un castillo de naipes.
La madre del sindicalista, Myriam Renée Chávez de Balcedo, histórica directora del periódico, recuperó el mando del medio en ese turbulento enero en el que su hijo cayó en desgracia, pero sólo faltaba que la investigación judicial avanzara un poco más para que ella misma terminara corriendo la misma suerte.
El pasado jueves se conoció la resolución del juez Ernesto Kreplak, titular del Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal Nº 3 de La Plata, en la cual resolvió procesarla con prisión domiciliaria y disponer el embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de 400 millones de pesos, entre otras siete personas. Todas ellas están involucradas en desviar más de 510 millones de pesos del Soeme, un vaciamiento que les permitió adquirir decenas de propiedades y más de sesenta automóviles, en su mayoría de alta gama.
El sábado por la mañana “Nené” le dijo a uno de sus más fieles empleados, uno de los pocos que quedaba desde la fundación del diario, que ya no podía abonarle el salario, y que recién cuando solucionara sus “problemas judiciales” iba poder seguir adelante con el matutino. Por la información contenida en la resolución del juez, no se trata de meros inconvenientes jurídicos que puedan arreglarse fácilmente con alguna apretada mediática ni con un par de gritos como estaba acostumbrada. Esta vez, es en serio.
La dueña del diario Hoy está acusada de formar parte de una banda que “funcionó en forma permanente, al menos desde el 1º de enero de 2012 al 4 de enero de este año, con el objeto de cometer delitos indeterminados, principalmente de contenido patrimonial”. En el fallo judicial se la considera “responsable prima facie del delito de asociación ilícita, lavado de activos agravado por haber sido cometido con habitualidad y como miembro de una asociación o banda (…), todo ello en calidad de coautor; y partícipe necesaria de la defraudación por administración infiel en perjuicio del Soeme”.
En febrero, Chávez de Balcedo hizo uso de su patota para restringir el ingreso a la redacción, ubicada en calle 32 entre 3 y 4, a más de 60 trabajadores del diario y la Radio Red 92. Con el correr de los meses, y desconociendo totalmente las resoluciones del Ministerio de Trabajo de la Provincia la sangría de despidos continuó, al mismo ritmo en que avanzaba la causa judicial.
En el último período, el matutino parecía más un diario íntimo de su dueña que un medio de comunicación. Aún así, continuaba recibiendo publicidad oficial. La tirada era cada vez más corta (no llegaba ni al 10% de los mentados 60.000 ejemplares diarios que decía repartir en sus mejores épocas) lo que motivaba las quejas sistemáticas de los más de cien canillitas que distribuían el periódico en los puestos verdes.
A quienes quedaban en la actualidad trabajando en el diario (alrededor de 15 personas en la redacción, y cerca de 30 entre el área comercial y la imprenta), les quedó debiendo un mes y medio de sueldo. A los trabajadores echados en febrero todavía les adeuda dos meses. A todos les debe las correspondientes indemnizaciones, cosa que acostumbró a hacer durante 25 años con la mayor parte de los empleados que despidió injustificadamente de la empresa. La lluvia de demandas judiciales ya está en marcha y de hecho dos trabajadores ya lograron trabar embargos sobre algunos de sus bienes.
Más allá de lo esperable de la situación, teniendo en cuenta la tamaña ilegalidad de los “negocios” del clan Balcedo, la imagen de la cadena y el candado sobre uno de los históricos medios de la ciudad causó una inevitable tristeza en el ámbito periodístico platense. La ciudad capital de la Provincia vuelve a tener un solo periódico de tirada masiva en papel. Los alrededor de 200 puestos de trabajo perdidos entre el diario Hoy y la radio Red 92 a causa de los negocios espurios de sus dueños, se suman al cierre del Canal QM sucedido el año pasado, al intento de desguace de la agencia Télam (cuyos trabajadores tanto de la corresponsalía platense como de todo el país todavía resisten), y a la agudización de la precarización laboral en el resto de los medios de comunicación de la región, con salarios que se encuentran lejos de alcanzar el nivel de inflación anual.
Al imperio de los Balcedo le llegó la hora de la Justicia, pero todavía queda un sabor amargo para quienes conocen la situación de cerca, que sólo podrá quitarse cuando los trabajadores y trabajadoras de prensa que terminaron engrosando las estadísticas de despidos en la ciudad cobren sus salarios adeudados y todo lo que les corresponde en concepto de indemnización, y más aún cuando se recuperen los puestos de trabajo perdidos.
Periodista y Licenciado en Comunicación Social. Sagitario en casa diez, ascendente en Piscis y luna en Capricornio. Buena mano para el mate. Trabajó en Infoanpress; diario Hoy; Agencia La Provincia; revista Avanzada Sindical; revista La Tecla y colaboró en ANRed. Escribe en secciones como Política, Derechos Humanos, Interés General y Socio Ambiental. Un poco sindicalista. No es tímido, nomás le cuesta entrar en confianza.