El colectivo de Adultxs por los Derechos de la Infancia visibiliza una historia de abuso pero también de festejo tras el regreso a una casa donde la Justicia avaló al abusador y dio la espalda a las víctimas. “Nos parece importante que con nuestros testimonios y experiencias de vida, mostrar que el hablar, pedir ayuda, salir a decir la verdad, es el primer paso para lograr una sociedad más sana”, explicó Silvia Piceda a Pulso Noticias
El 19 de Noviembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Abuso contra los Niños y el colectivo de Adultxs por los Derechos de la Infancia decidió festejar este lunes para visibilizar una historia de tantas que tienen que ver con este flagelo que sigue vigente en el silencio y la oscuridad.
Una de las referentes de este colectivo que reúne a sobrevivientes víctimas de abuso infantil es Silvia Piceda, quien fue abusada durante su niñez por “personas cercanas a mi hogar”. Sin embargo, años después, cuando Silvia ya había formado una familia y tenía una hija de 11 años, recibió una visita que le cambió la vida: “en Septiembre del 2009 aparece Romina que era hijastra del padre biológico de mi hija, para decirme que había sido abusada a sus once años por este hombre”.
Ahí empezó un nuevo momento para la vida de Silvia, su hija y Romina, que no pararían hasta ahora: “algo muy angustiante fue ir a la justicia, ir al juez Rondina de La Plata, a pedirles ayuda para cuidar a mi hija… pero me encontré que en el Poder judicial no solamente no defendieron a mi hija sino que me obligaban a involucrarla con este hombre que había abusado de Romina”, explicó.
A 10 años de aquel encuentro entre Romina y Silvia, los adultxs por Los Derechos de la Infancia decidieron elegir el día lunes 18/11 para festejar dicho encuentro: “fue mi hija la que eligió la palabra festejo, porque a partir de que Romina viene con su verdad, a mi me obligó a ser una mamá protectora”, explicó. “Mi hija hoy con 21 años quiere festejar la llegada de Romina con esa verdad, que a ella le significó mudarse, vivir escondida, pero que quiere agradecer y festejar, esto es lo importante de la verdad”.
En aquellos años, ante tanto encubrimiento judicial, Silvia decidió autoexiliarse a la Ciudad de Buenos Aires abandonando su casa: pero tiempo más tarde madre e hija lograron retornar a su casa, la cual tuvieron que abandonar para evitar la revinculación de la niña con su progenitor y presunto abusador.
El abuso sexual en la infancia
Para Silvia Piceda el abuso sexual en la infancia es un delito que cuenta con el mayor cómplice: el silencio… “por eso nos parece tan importante que con nuestros testimonios y con nuestras experiencias de vida, mostrar que el hablar, pedir ayuda, salir a decir la verdad, es el primer paso para lograr una sociedad más sana y en cada uno de los sobrevivientes, mas feliz, más plena”, resumió Silvia en comunicación con Pulso Noticias.
El 19 de Noviembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Abuso contra los Niños y este colectivo eligió esta fecha “para rememorar, para volver a visibilizar y pensar como adultos, cómo vamos a hacer para que se cumpla esto de prevenir el abuso sexual a la infancia”.
El encuentro en la casa de Abasto significa mucho para los Adultxs por los Derechos de la Infancia: “Queremos festejar el poder de la verdad y todo lo que me obligó a hacer como mamá para ser protectora de mi hija… tenemos que pensar cómo vamos a hacer para asegurarle a la infancia, por una sociedad más justa, donde los delincuentes y agresores sean los que circulen avergonzados, y que las víctimas sean mimadas, tengan espacios para poder contar, escribir lo que le sucedió, y asegurar que todos tengamos una vida plena”.
“Es fundamental que la sociedad adulta asuma su responsabilidad de defensa de los derechos de infancia. Tenemos que entender que solo los adultos podemos parar con el desastre que sufre la infancia en la actualidad, parar el abuso, el maltrato, que la niñez sea ese momento que seamos protegidos, tenidos en cuenta. y esa responsabilidad es de los adultos y adultas”, finalizó.
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