Hoy se reúnen con funcionarios municipales. Aseguran que cada vez que llueve no pueden entrar patrulleros ni ambulancias. Iniciaron el reclamo en la Subsecretaría de Obras Públicas en enero, pero todavía siguen sin respuestas
Vecinos del barrio Las Luciérnagas, en la localidad de Arana, reclaman algo tan básico como poder entrar y salir de sus casas. Los accesos a las mismas se encuentran intransitables y desde enero están esperando la respuesta de la Subsecretaría de Obras Públicas a los pedidos de mantenimiento y mejorado de las calles de entrada al predio. Hoy a las 11 tienen una reunión con funcionarios municipales para abordar el problema.
Se trata de un barrio que nació en 2013, después de que una ordenanza municipal rezonificara el área, que dejó de considerarse zona rural para pasar a ser urbana. Así fue cómo el trazado que se dibuja uniendo las calles 140 a 143 y 637 a 650 comenzó a ser construido con el esfuerzo y sudor de sus propios habitantes. “Nosotros nos comprometimos a hacer un montón de obras y las cumplimos. Obras de hidráulica, tendido eléctrico, abrimos las calles, respetamos todos los planos que se aprobaron en la Municipalidad. Somos contribuyentes, pagamos los impuestos de la Agencia Platense de Recaudación y no nos dan ni una mano”, explicó Fabricio Breccia, uno de los vecinos afectados, en diálogo con Pulso Noticias.
Es que, tras haber iniciado el expediente 1.062.428/2018 a principio de año para pedir el mejorado y mantenimiento de los accesos, las respuestas de la Comuna no han estado a la altura de lo que piden las alrededor de 80 familias que viven en Las Luciérnagas. “Nos anticipamos a la época de lluvia para pedirle al Municipio que haga las obras para que podamos entrar y salir del barrio. Pero nunca tuvimos una respuesta concreta”, dijeron.
“La semana pasada llovió y fue imposible entrar al barrio. Lamentablemente sufrimos un robo y ante la denuncia el patrullero no pudo ingresar. Una ambulancia nunca podría haber entrado”, relató Breccia, y agregó: “Básicamente lo que pedimos es que podamos entrar y salir del barrio. Entendemos que es un derecho que nos asiste”.
Para peor, contó que “la Municipalidad en todo este tiempo mandó unas máquinas durante dos días y no sólo no arregló las calles, sino que empeoró lo que nosotros teníamos bien. Fueron con una motoniveladora, aplanaron las calles pero le sacaron el abovedado, y lo que sobraba lo fueron tirando para el lado de la zanja. Sería mejor que no hubiesen ido”.
Mañana a las 11 serían recibidos por funcionarios de la Subsecretaría de Obras Públicas, pero de todas formas los vecinos están atentos a posibles dilaciones. “Nos dicen que van a venir a hacer un relevamiento y después no pueden, nos pautan reuniones y se suspenden, y así nos van dilatando. Siempre la persona con la que hablamos no es la que decide, entonces se tiran la pelota entre los funcionarios”, explicó Breccia al enumerar los retrasos y desplantes permanentes.
En ese marco, recordó las características de la zona: “No es un barrio que se esté armando con intenciones de especulación inmobiliaria. Al contrario, fue la lucha de un montón de vecinos y vecinas que no tenían manera de acceder a la tierra y poder construir una vivienda y la única manera en que lo podían hacer fue organizándose entre cien, ir, comprar y poner los pocos mangos que ganamos en hacer las obras. Pero necesitamos ayuda porque no nos alcanza”.
Cabe recordar que en 2014 los pobladores de Las Luciérnagas ganaron el Proyecto 128 del Presupuesto Participativo para el asfalto de calles. Pero las obras nunca se realizaron. En 2015, luego de los reclamos, la Municipalidad reconfiguró el proyecto como mejorado y zanjeo para “hacerlo viable”. La ejecución del mismo se tramita bajo expediente 4061-945339/2014 y consta la solicitud de pedido y gastos aprobada para el ejercicio del presupuesto de 2015, pero nunca fue efectuado el llamado a licitación con el pliego técnico correspondiente.
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