Cambiemos impuso su mayoría en el Concejo Deliberante para avanzar en proyectos cuestionados por profesionales que alertaron por el posible impacto hídrico. Fue a puertas cerradas, impidiendo que integrantes de las asambleas de vecinos inundados pudieran presenciar la sesión
Este miércoles el oficialismo en el Concejo Deliberante consiguió avanzar en la aprobación de indicadores urbanísticos para 34 desarrollos inmobiliarios, en una sesión caliente donde no se permitió el ingreso de representantes de las asambleas de vecinos inundados (aquellas que vienen funcionando ininterrumpidamente desde la tragedia del 2 de abril de 2013) para que pudieran presenciar la sesión.
Cabe recordar que se trata mayoritariamente de decretos firmados por el ex jefe comunal Pablo Bruera, que otorga indicadores urbanísticos a una serie de loteos (algunos de ellos son barrios construidos a partir del plan Procrear, otros futuros desarrollos urbanos) pero que nunca fueron ratificados por el Concejo Deliberante, por lo tanto no están regularizados y los trámites para realizar escrituras no se pueden terminar. Pero además, junto con éstos, hay un decreto del actual Intendente Julio Garro, que autoriza la construcción de un importante emprendimiento denominado “Clementina II”, en la cuenca alta del arroyo Carnaval en City Bell.
El problema es que todos estos sectores están catalogados como “zona de reserva urbana”, y la intención de las ordenanzas aprobadas fue la de habilitarlos como zonas residenciales, ya que de otra forma las construcciones no podían avanzar. Los concejales opositores afirman que de esta forma se termina modificando de “forma encubierta” el Código de Ordenamiento Urbano (COU) habilitando este tipo de excepciones sin los estudios pertinentes.
En ese sentido, la oposición ya había denunciado, en las pocas reuniones de la Comisión de Planeamiento que hubo para tratar estos desarrollos, que lo que hay detrás es un “millonario negociado inmobiliario”, y por esta razón afirman que el Municipio tiene apuro y le dio un tratamiento “exprés”.
La semana pasada hubo una reunión realizada entre vecinos de las asambleas, concejales opositores y profesionales universitarios, entre los que se encontraban la arquitecta Isabel López, y el ingeniero Pablo Romanazzi, ambos con profundos conocimientos respecto de la planificación hidráulica y urbana de la ciudad. Fueron precisamente éstos últimos los que alertaron sobre el riesgo de estos proyectos, y reclamaban que no se avanzara hasta tanto estuvieran los primeros resultados del futuro Plan Director de Reducción del Riesgo de Inundaciones que la Municipalidad realizará con la Universidad Nacional de La Plata (y que fue aprobado este miércoles en la misma sesión) .
Estos expedientes fueron rechazados por los bloques del FPV-PJ, FPV-UC, GEN, y por la concejal de Cambiemos Florencia Rollié, quien señaló: “El Estado municipal dejó en manos de privados la planificación urbana. Acá hay una ausencia de un modelo de ciudad que indique por dónde y cómo se desarrollará el crecimiento”. A su vez, volvió a señalar que los proyectos estaban incompletos, ya que ninguno tenía realizados “estudios de impacto hídrico previos”.
Foto: Nicolás Braicovich
Por su parte, Victoria Tolosa Paz (FPV-UC) recordó que en años anteriores había habido “excepciones, para los casos de los terrenos del Procrear, que eran exclusivamente para viviendas unifamiliares. Acá esa aclaración no está hecha”. Y afirmó a su vez que se trata de alrededor de 1800 lotes, de los cuales solo 200 implican viviendas que ya están efectivamente instaladas. De hecho, junto con otros bloques opositores había pedido que los proyectos se trataran de forma separada, para diferenciar los desarrollos inmobiliarios de los terrenos donde ya hay viviendas.
Foto: Nicolás Braicovich
Además, aseguró: “Por el valor actual de los lotes, estamos hablando de un negocio de 90 millones de dólares”, y volvió a insistir en que no se estaba teniendo en cuenta la normativa provincial para extraer de estos proyectos “una plusvalía urbana”, que permita la realización de obras para mitigar los efectos que puedan tener estas construcciones.
En tanto, Norberto Gómez (FPV-UC), uno de los concejales que integra el Concejo Único de Ordenamiento Territorial, presentó un dictamen en minoría que no sólo rechaza los proyectos si no que también pide que se derogue el artículo 267º del COU, que es el que permite al Poder Ejecutivo realizar estas rezonificaciones.
Por el lado del oficialismo, el presidente de la Comisión de Planeamiento, Javier Mor Roig fue el encargado de defender el proyecto haciendo hincapié fundamentalmente en que se trataba de regularizar una situación preexistente para que se avance en escrituras que beneficiarían a más de 15.000 vecinos.
Foto: Nicolás Braicovich
A su vez, Cambiemos incorporó a último momento a los expedientes en la reunión de Labor Parlamentaria un artículo para disminuir las críticas opositoras que indicaba que estos desarrollos urbanos serán supervisados por el mencionado Plan Director que la Municipalidad desarrollará con la UNLP, por lo que el análisis del riesgo hídrico estaría garantizado por estos profesionales.
Tras la aprobación de estos expedientes, también se despacharon otros -la mayoría con el mismo tenor de las críticas opositoras en torno a la ausencia de una planificación urbana- dando luz verde a la construcción de una clínica de mediana complejidad en zona céntrica (de 10 pisos de alto) perteneciente a la obra social del sindicato de comercio Osecac; un mega emprendimiento inmobiliario en una antigua cantera de Gorina; un inmenso centro comercial en Camino Belgrano y 511 que además contará con cines, oficinas, complejo de viviendas y hasta un hotel, y un shopping ubicado en una parte ociosa del Club Universitario sobre Camino Centenario, que forma parte del plan de recuperación económica de la entidad.
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