Gracias a una medida cautelar dictada por un juez de la corte suprema de justicia, el ex mandatario podría salir de la cárcel hasta tanto la sentencia quede confirmada por tribunales superiores
El magistrado de la Corte Suprema de Brasil Marco Aurelio Mello dictó hoy una medida cautelar que ordena “la liberación de todos los presos condenados en segunda instancia hasta que las sentencias sean confirmadas por tribunales superiores”. Esta medida es la que podría definir la excarcelación del expresidente Luiz Ignácio Lula da Silva que fue condenado por corrupción a doce años de prisión el 7 de abril último.
La decisión del juez se apoya en un artículo de la Constitución, según el cual una pena de prisión solo se puede comenzar a ejecutar una vez que se cumpla lo que en el país carioca se conoce como “tránsito en juzgado”, es decir; cuando ya se dio el fin de todo el proceso de apelaciones. En tanto, Mello señaló que la medida se ajusta “al artículo 283 del Código Penal” y que “está en armonía con la carta magna brasileña”.
Aunque la cautelar es de efecto inmediato, la jueza Carolina Lebbos indicó que aún no había recibido el comunicado oficial de la decisión de Mello. Si ella no lo concreta antes de las 19 horas, quedará entonces en manos del juez de turno que comienza hoy su turno por la feria judicial.
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