Familiares de la joven fallecida junto a sus dos pequeños hijos de 1 y 2 años sospechan que fue provocado y culpan a quien era su pareja. Del otro lado, familiares del joven indican que fue ella misma quien generó las llamas. Una relación marcada por la violencia de género
El martes pasado se vivió una pesadilla en el barrio Santa Rosa de Abasto, cuando una joven identificada como Abigail Gómez (23) y sus dos pequeños hijos (de 1 y 2 años) murieron calcinados tras el incendio de la casilla en la que vivían, en la zona de 184 y 33. Además, otra beba de apenas 5 meses pudo ser rescatada a tiempo. Al día de hoy, son más dudas que certezas las que se tienen sobre el hecho y, mientras avanza la investigación, ya hubo versiones cruzadas sobre la supuesta intencionalidad del siniestro.
Por un lado, la familia de la pareja de la joven fallecida sostiene que habría sido ella misma quien generó las llamas, pero por el otro, los allegados de la joven denuncian que el culpable del desastre fue el propio muchacho, quien sometía a la víctima a una constante violencia de género, que hasta incluyó una restricción perimetral de la Justicia.
“Lo que ella vivía realmente lo sabían sus amigas y vecinos”, contó una de las familiares de la joven en un testimonio al que tuvo acceso Pulso Noticias. Ayer, junto a vecinos y otros allegados cortaron la zona de 44 y 182, reclamando justicia por el hecho. “Hizo muchas denuncias y nunca nadie la escuchó, siempre quedó todo en la nada”, contaron.
“Es como que pasó y todos sabíamos que iba a pasar; él tenía perimetral y se le metía en la casa como si nada”, se quejó entre lágrimas la tía de la joven fallecida, al tiempo que lamentó el fatal desenlace. “Por algo están todos los vecinos acá, era una chica divina, la quiere todo el mundo. Luchaba todo el tiempo por sus hijos”, expresó.
El hecho ocurrió el martes por la noche, pero los familiares cuentan que desde el domingo la pareja ya venía arrastrando una nueva discusión, que habría incluido golpes y agresiones, por las que tuvieron que intervenir otras personas. “El lunes volví a su casa y ella seguía acostada toda tapada, y no quería hablar; yo pensé que era por lo del domingo”, contó una amiga de Abigail.
Al llegar al lugar del incendio, se encontraron con el desastre: “Cuando fui y miré estaban los tres cuerpos abrazados metidos adentro del ropero. Yo deduzco que es porque se habrá metido ahí para no quemarse”. “Los tres murieron calcinados, los nenes abrazados a su mamá”, relató.
“Él me dijo a mí el domingo pasado que si seguía así la iba a matar a ella y a los nenes, y yo pensé que me decía en chiste, y yo le dije son tu mujer y tus hijos”, contó la amiga consternada. “No se mató, yo sé bien que no se mató y no sería capaz de eso”, cerró.
La otra versión
El miércoles pasado, Héctor, el cuñado de la joven fallecida, dijo en declaraciones que la tragedia fue consecuencia de “una fuerte discusión”. Pero sostuvo una versión totalmente distinta. “Mi cuñada prendió fuego una cortina y las llamas enseguida tomaron el telgopor del cielorraso”, deslizó. Según este joven, su hermano “le dijo (a Abigail) que saliera junto a sus hijos, pero ella le dijo que ella se quedaba con los chicos”.
La causa está siendo investigada y se esperan los resultados de las pericias de rigor que se realizaron en el lugar de los hechos, al tiempo que se iniciaron actuaciones bajo la carátula de “averiguación de causales de muerte”. Interviene al Jefatura Departamental, a cargo de Javier Martínez.
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