Se trata de seis trabajadores que, luego de reivindicar una serie de derechos, fueron cesanteados por la compañía. Uno de ellos nos dio su testimonio en esta entrevista
Eduardo Galván, trabajador despedido de la fábrica del plástico Amiplast en Ensenada, dialogó esta mañana con el programa de radio Primera Maraña, que co-producen Pulso Noticias y Radionauta, donde explicó la situación que atraviesa junto a un grupo de compañeros.
Primeramente, Galván se refirió al proceso de organización que vienen sosteniendo desde hace dos años: “En 2020 despidieron a 19 compañeros, en un momento en que no se podía despedir trabajadores. Pero logramos reincorporarlos. En diciembre de 2021, hicimos un petitorio para pedir derechos fundamentales a la empresa: ropa de trabajo, media hora de descanso, pase a planta de compañeros que hacía 5, 6 u 8 años que estábamos tercerizados. Ante esa situación, a la empresa y al sindicato del plástico no les gustó lo que veníamos manifestando y decidieron echarnos. En mi caso hace cinco meses, con la excusa de que ya no necesitaban más de nuestros servicios.
—¿El Ministerio de Trabajo tomó cartas en el asunto?
Nos dieron una primera audiencia virtual donde se le exigía a las empresas la reincorporación. Al estar tercerizados estamos con dos empresas: una es Trelan, que está en Capital y la otra es Amiplast. El viernes pasado tuvimos una segunda audiencia donde las empresas no quisieron que entremos a trabajar y, en ese sentido, el Ministerio de Trabajo avaló lo que decían las empresas. Nos fuimos muy disconformes. Nos dejaron prácticamente en la calle. El Ministerio avala este tipo de empresas que vulneran derechos y mantienen el trabajo precarizado. Nos están empujando a que vivamos de bonos o planes y no es lo que queremos. Lo que queremos son nuestros puestos de trabajo y que la empresa cumpla con lo que le corresponde.
—¿Y el Sindicato?
El sindicato brilla por su ausencia. La mediadora no tuvo mayor intervención. A nosotros eso no nos sirve. Tenemos un Ministerio que puede mediar entre la empresa y nosotros, y no lo hizo. Somos seis familias de trabajadores que estamos sin nada porque iniciamos reclamos. Por eso decimos que fue discriminatorio; por pedir algo esencial nos echaron. La vamos a seguir peleando.
—¿Cuáles son las próximas acciones que planean llevar adelante?
Como ya no tenemos una vía por el Ministerio de Trabajo, vamos a ir vía judicial, presentando una medida cautelar que avale la discriminación que sufrimos por pedir cosas que eran fundamentales. Vamos a estar organizándonos para ir a la fábrica y pedir que nos tomen. Estamos en esa perspectiva. Estamos prácticamente desamparados; nos están apoyando trabajadores y estudiantes. Si es por parte de las instituciones, quedamos solos. Nuestra postura es seguir peleándola y ver qué podemos hacer en estos días para ir a la fábrica.
—¿Dónde encontraron más apoyo para su lucha?
Empezamos a organizarnos, a pasar por diferentes fondos de lucha, por diversas facultades. Pasamos por Trabajo Social, Humanidades, Ingeniería, Arquitectura y nos dieron una mano muy grande, apoyaron nuestra lucha. Los decanatos también fueron imprescindibles porque nos firmaron un acta apoyando todo lo que veníamos haciendo. También pasamos por lugares de trabajo como Astillero e YPF, donde también aportaron a nuestro fondo de lucha.
Somos un medio de comunicación cooperativo que se conformó luego de los despidos ilegales en el diario Hoy y en la radio Red 92 de La Plata, sucedidos a principios de 2018.
Sin laburo y con la intención de mantener nuestros puestos de trabajo, un grupo de periodistas, correctorxs, fotógrafes, locutorxs, productorxs audiovisuales y diseñadorxs decidimos organizarnos de forma colectiva.
